miércoles, 18 de enero de 2017

Bufandas con telar!

Hola a tod@s!

Parece que estos días el frío va a apretar pero bien 😣. Pero no pasa nada, es una buena oportunidad para usar bufandas, gorros y guantes 😜. Por eso hoy os quiero enseñar cómo hacer bufandas y cuellos sin necesidad de que sepáis hacer ganchillo ni punto a dos agujas, como esta que veis abajo:


Seguramente os preguntaréis cómo... Pues allá vamos!

El año pasado descubrí un artilugio muy raro en una tienda, que en principio no supe para qué era. Según las instrucciones, era un telar, pero no decía  mucho más. Cuando llegué a casa me puse a buscar información y vi que se podían hacer bufandas muy bonitas usando este tipo de telares. Yo ya sabía más o menos tejer con dos agujas y ya había hecho algunas cosas a ganchillo, pero me pareció interesante probar este cacharro que había encontrado por casualidad 😊



Mi telar es rectangular, pero los hay también redondos (para gorros, calentadores...); son fáciles de encontrar en muchos bazares. Consta de dos filas de "pinchos" enfrentados. Básicamente, el proceso consiste en ir llevando la lana de un pincho al opuesto, y así ir avanzando por los pinchos. Se repite el paseo por los pinchos en sentido contrario para conseguir dos vueltas en cada pincho y, entonces, se saca la hebra inferior del pincho. Así se hace en todos los pinchos, y volveremos a tener una hebra en cada uno. Se repite todo el proceso otra vez, y así iremos consiguiendo que la bufanda se alargue hasta conseguir la longitud deseada.

Bufanda de rayas simples


Si buscáis por internet, podréis encontrar un montón de tipos de puntos diferentes para que probéis y os decidáis por los que más os gusten. Podéis conseguir distintas texturas, como por ejemplo en esta bufanda, en la que combiné punto liso y punto trenzado:

Bufanda a dos texturas alternadas


Yo me centré durante casi todo el invierno pasado en las bufandas de rayas, con punto liso y con punto trenzado. Aquí os dejo algunas de las que hice para que os sirvan de inspiración, pero ya sabéis que cualquier idea es buena y os animo a que inventéis! 

Bufanda de rayas dobles


Bufanda de rayas verticales


Bufanda de dos texturas, una en cada cara



Hasta la próxima!







lunes, 9 de enero de 2017

Bufanda a punto musgo!

Hola a tod@s! Estas navidades he tenido varios encargos y no he tenido tiempo para escribir 😞 

Aprovechando que he hecho cosas nuevas, hoy os traigo un regalito de Reyes. Es una bufanda que le he regalado a mi abuela y que espero que vaya a usar mucho. Es muy fácil de hacer, solo necesitáis un poco de paciencia y una lana bonita.

Aquí os dejo el resultado y a la modelo 😁



Yo he utilizado la lana Rayas de la marca Caricia. Es todo un descubrimiento! 

Podéis encontrarla en muchísimas variedades, todas ellas mezclan tramos de distinto color, dando un resultado muy divertido al tejerla.  



Es recomendable trabajarla con una aguja de ganchillo de 3-4mm, dependiendo de lo prieto que queráis el tejido. El tacto es bastante suave, es muy agradable de trabajar y el resultado es muy cálido. Me ha sorprendido mucho esta lana y volveré a usarla en cuanto pueda 👌

Toda la bufanda está tejida a punto musgo, que ya os conté en el paso a paso de la alfombrilla improvisada. Dependiendo de lo ancha que la queráis, deberéis montar más cadenetas. La mía tiene 31 cadenetas y mide unos 16-17cm. Recordad que para este tipo de punto hay que montar un número par+1.


El punto consiste, básicamente, en alternar un punto bajo con una cadeneta, que en la siguiente vuelta se alternará, consiguiendo un efecto de zigzag debido a la alternancia "punto-agujero". Como véis en la siguiente foto, el resultado es muy bonito debido a la variación de colores de la lana.


Cuando tengáis el largo deseado, cerrad la última vuelta y esconded bien la hebra. Yo he utilizado más o menos un ovillo y cuarto para conseguir una longitud de 1,5m.

Pues ya está! Ahí es dejo esta idea por si tenéis que hacerle un regalo original y secinllo a alguien 😉

 Hasta la próxima!







lunes, 2 de enero de 2017

Alfombrilla improvisada!

Hola a tod@s!

Lo primero, Feliz Año nuevo!! después de estos días de fiestas sin publicar nada, os traigo la primera entrada del año 😉

Lo que os traigo hoy es un proyecto que se me ocurrió hace unos días y que fue totalmente improvisado. Se trata de una alfombrilla de trapillo rectangular, ideal para sacar los pies de la cama y no tener que pisar el frío suelo matutino ❤

Últimamente, tengo todas las agujas de ganchillo repartidas en dos casas, así que a veces no tengo lo que necesito para tejer lo que tengo en mente... Uno de estos días tuve una idea para ir haciendo poco a poco mientras veía la tele, y como yo tengo que tener las manos siempre ocupadas en algo, lo único que se me ocurría era hacer algo con trapillo usando los dedos. Buscando y buscando encontré dos ovillos que tenía abandonados porque nunca supe para qué usarlos y ya los había olvidado, y resultaron tener el grosor perfecto para tejer con los dedos 😁

Trapillo grueso para tejer con los dedos
 Es una alfombra bastante fácil y rapidilla de hacer. Se usa todo el tiempo el mismo tipo de punto, y yo he alternado los dos colores cada dos filas, pero se puede usar la imaginación toooodo lo que os apetezca!

Cuando no tienes agujas disponibles, esto es una buena técnica!

Para empezar, he montado 31 cadenetas, lo que me ha dado una longitud de 60cm. El alto de la alfombra lo controlaréis parando de tejer cuando os convenga. Os dejo un patrón por si os es más fácil seguirlo así...

http://www.tejiendoperu.com/crochet/galer%C3%ADa-de-puntos-fantas%C3%ADa-15/
Punto musgo. Fuente: tejiendoperu

Y, a continuación, os lo voy a intentar explicar como mejor pueda:

Vuelta 0: Tejer las cadenetas que serán la base del trabajo. Podéis variar la longitud teniendo en cuenta que el número de cadenetas debe ser un múltiplo de 2 más una cadeneta de regalo 😉. 

Vuelta 1: Una vez tengáis las cadenetas necesarias, debéis hacer dos más y girar el tejido para comenzar la primera vuelta. Ahora se teje otra cadeneta y se hace un punto bajo saltando la primera cadena: esto dejará un hueco. Repetimos este paso hasta el final de la vuelta: cadeneta al aire saltando un punto, punto bajo en la siguiente cadena. Al final tendremos la primera vuelta formada por punto bajo-hueco-punto bajo-hueco... He aquí la importancia de montar el número correcto de cadenetas, para terminar las vueltas con un punto bajo.

Vuelta 2-pares: Terminada la primera vuelta, volvemos a hacer dos cadenetas, que equivalen al primer punto bajo. Ahora, tejeremos un punto bajo sobre cada uno de las cadenetas que dejaban agujero en la vuelta anterior, y entre cada punto bajo vamos tejiendo una cadeneta para saltar los puntos bajos de la vuelta previa. Todas las vueltas pares de la alfombrilla las haremos repitiendo esta vuelta. Recordad que debemos terminar siempre realizando un punto bajo al final de la vuelta.

Vuelta 3-impares: Al inicio de cada una de las vueltas impares he cambiado el color del trapillo. Podéis hacerlo o no. Al acabar la vuelta previa, como siempre, hacemos dos cadenetas y giramos el tejido. Entonces, simplemente, tenemos que tejer una cadeneta para saltar el punto bajo de la vuelta anterior, seguido de un punto bajo sobre la cadeneta del agujero, así hasta llegar al final de la vuelta, donde terminamos con el ya conocido punto bajo final.

 
Detalle de las vueltas en los dos colores


Aquí podéis ver cómo queda el punto. Al ir "tapando" los agujeros con los puntos bajos, el tejido final no queda agujereado, sino que da la sensación de ir haciendo ondas o zigzag de cada color.

Cuando hayais terminado de hacer todas las vueltas hasta conseguir el alto deseado, ya solo queda rematar la alfombrilla con un borde de cadenetas en el color que más os guste. Yo elegí el trapillo negro que había estado utilizando. El resultado final que yo obtuve fue el siguiente:



Observaciones:

- El trapillo que yo he utilizado no lo compré específicamente para hacer esta alfombra, sino que eran restos, por lo que no ha sido el más adecuado para esta labor. Su grosor era algo diferente y su textura... Ahora os cuento mejor:

*El trapillo negro resultó ser elástico, así que tenía que estar muy pendiente de hacer el tejido sin dejarlo tirante, porque si no tendía a menguar y a deformarme la alfombra. 
* El trapillo blanco/gris tenía metros "peludos" y metros de tejido normal, por lo que el resultado de este color ha sido desigual a lo largo de la alfombra. Esto a mí no me ha importado, porque le ha dado un toque especial al tejido.

Con esto quiero decir que, para haber sido un proyecto improvisado, estoy contenta con el resultado, pero os recomiendo que antes de empezarlo, vosotr@s los preparéis un poco mejor que yo 😛.


Y por hoy nada más. Espero que os animéis y me enseñéis vuestros resultados!! Suerte con el año que entra 😃